lunes, 19 de septiembre de 2016

Dial

"Nada hay peor que el no entender. Nada mas irritante que las interferencias en tu emisora de radio favorita. Esa que gestiona tu mente y que con la antena mal puesta distorsiona la voz.

Sí, tu voz, perdida en el dial.

Y no lo entiendo, y, quizá, no lo entenderé nunca. Es posible que no esté en el mundo para entenderlo todo, pero siempre estuve para entenderte. Y me perdí, no se en que capítulo de esta radio novela.

Lo siento. Nunca fui capaz de estar aquí para no comprender, y necesito, cuanto menos una explicación, lógica y coherente de por qué me he perdido.

No hay GPS que aclare esto, las coordenadas se escapan entre mis dedos. Desconozco dónde estoy.

Igual es mas fácil de lo que creo, igual solo es que has cambiado de dial porque esta emisora ya no te interesa...es mas que probable que sea eso...pero dímelo, con franqueza, no temas que duela mas de lo que duele ahora....créeme, es imposible."

martes, 13 de septiembre de 2016

Otoño

""El deseado otoño se vislumbra poco a poco en el panorama cotidiano. Con él, la melancolía encuentra ese refugio que le ha sido negado durante el verano. Llega su momento. Llega su hora. Retornan los recuerdos, las añoranzas, mas fuerte que nunca.

No sabemos lo que hemos perdido, hasta que llega el otoño con su nostalgia.

Entre sus hojas doradas encuentro a la niña temblorosa que huyo en primavera de la exaltación de las flores y la sangre. Que se escondió para quizá no volver. Aunque siempre se deje ver en otoño entre hojas secas y raíces descubiertas en bosques poblados de robles desnudos con sus ramas como manos enlazadas por las que el viento susurra palabras no dichas al oído.

Siempre en otoño.

El otoño y tu presencia persistente por los rincones de mi alma. Y ese no atreverme a sonreír o hacerlo solo de verdad. Y ese despojarme de las hojas inútiles que me cubren falsamente y ser mi tristeza congénita anclada en la mirada.

Y mirarte largo y tendido como te gusta......con descaro otoñal.""

lunes, 5 de septiembre de 2016

Acariciar gatos....

"La verdad, cuando tienes claro que la persona que quieres va a pasar de ti. Se siente una mezcla de alivio y pena. Alivio porque ya puedes ser todo lo natural que quieras, se pierde la timidez, y el miedo al rechazo porque el NO ya está ahí. Hasta el punto de olvidar la tiranía del encaje, aunque te encante, y abrazar el algodón de tus bragas como un crio a su peluche, eso sí, unas bragas monisimas.

Sí, la vida se simplifica. Ya no haces planes en función de esa persona, esperando inútilmente que responda a tu llamado. Y, aunque tu mirada perdida, en ocasiones te recuerde que te gustaría que llamara a tu puerta, sientes que se esta mas a gusto acariciando el lomo de tu gato.

Si antes se quedaba para "vestir santos", ahora es casi mas "vintage" quedar para acariciar gatos.

A veces incluso te atreves a soñar con gente que te gusta con la que igual te dabas un revolcón sin transcendencia y, aunque sabes que tampoco va a suceder porque en estos asuntos la vida mira hacia otro lado, te permites ese pequeño lujo casi culpabilizador porque el corazón, que es muy ladino, te recuerda que quieres a otra persona y te sientes hasta infiel con alguien que te ignora. ¡¡¡Qué cosa mas absurda!!!.

En ocasiones sobreviene la pena. Esa perdida ambigua se te clava en el alma y te cuenta al oido aquellas cosas que no te gusta escuchar ni en susurros. Y se impone la realidad, el pijama de unicornios, la botella de vino  y un plato de pasta bien surtida de queso para olvidar toda esta mierda mientras acaricias a tu gato. "
M.V.E